sábado, 30 de abril de 2016

Toledo en el otoño de 1960 fotografiado por Joseph Jacobson y María del Carmen Rivero Hernández

Hace casi cincuenta y seis años, una joven pareja de recién casados recorría las calles y los rincones de Toledo cámara en mano durante su luna de miel. Se trataba del estadounidense Joseph Jacobson y la toledana María del Carmen Rivero Hernández, que acababan de contraer matrimonio en Madrid a finales del mes de octubre de 1960.
Joseph, nacido en Nueva York pero residente en Oklahoma City desde los siete años de edad, había conocido a María del Carmen en Madrid durante unas vacaciones en España. Ella había nacido en Orgaz aunque pasó toda su infancia y juventud en la ciudad de Toledo. Tras conocerse en Madrid, surgió el amor y decidieron casarse. Se trasladaron a vivir a Oklahoma y de su matrimonio nacieron cuatro hijos, una niña y tres varones. Hoy, más de medio siglo después, es gracias a uno de aquellos niños (su hijo Anthony) que podemos disfrutar de las preciosas fotografías que la pareja de recién casados tomó en Toledo aquellos días de finales de octubre y principios de noviembre de 1960.
Joseph Jacobson y María del Carmen Rivero Hernández en octubre o noviembre de 1960. Álbum familiar.
Se trata de una serie de bellas fotografías a color que retratan la vida de aquel Toledo que veía convivir los viejos usos y costumbres con los primeros signos de modernidad. Es una colección que supone el retrato de toda una época.
Comenzaremos por ver esta impagable imagen de unos burros cargados con voluminosos fardos vegetales a su paso por la plaza de Santo Domingo el Real. Es un privilegio para la vista poder admirar en color una escena que podía verse en esta plaza tal como venía sucediendo desde siglos y siglos atrás pero que sin embargo pocos años después sería ya solo un recuerdo del pasado:
Plaza de Santo Domingo el Real en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

Joseph y María del Carmen retrataron también los alrededores de la Sinagoga del Tránsito, por donde siempre merodeaba el típico vendedor de cerámica:
Sinagoga del Tránsito en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y María del Carmen Rivero Hernández .
Sinagoga del Tránsito en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y María del Carmen Rivero Hernández .

Algunas de las fotografías más espectaculares obtenidas por el joven matrimonio corresponden al río Tajo. Cuando estaba libre de contaminación y el maldito Trasvase Tajo-Segura aún no acechaba en el horizonte, la fluctuación estacional del caudal dejaba estampas de gran belleza. Una de las más coloridas se observaba tras episodios de lluvias intensas, cuando el fuerte caudal erosionaba las arcillas del famoso "alcaén" situado justo aguas arriba de la ciudad confiriendo un precioso tono rojizo a las aguas que contrastaba con el más azulado, propio del Tajo desde la cabecera, y que era visible en Toledo en las épocas de pocas lluvias, sin erosión ni arrastres. Aquellos días previos a la visita del matrimonio Jacobson Rivero, debió llover con intensidad como demuestra no solo el intenso tono rojo del agua sino el elevado nivel de las aguas:
Río Tajo en Toledo, junto al cerro de la Cabeza, entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .
Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .
Río Tajo en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .
Río Tajo en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

Los más observadores ya habréis caído en la cuenta de la absoluta carencia de vegetación en las orillas, así como en buena parte de los cerros del Valle hoy colonizados por encinas, almeces, enebros y retamas. Y es que en 1960 aún podía verse el aspecto de tremenda aridez que ya se observa en las imágenes más antiguas del siglo XIX, puesto que aún no habían llegado los cambios sociológicos, culturales y ambientales que han posibilitado el reverdecimiento que hoy es palpable en Toledo. En 1960 aún se cocinaba con leña o carbón en casi todas las casas; en 1960 la cabaña ganadera de ovejas y cabras que pastaban en estos cerros era aún muy grande; en 1960 las casas se calentaban casi en su totalidad a base de leña o carbón; en 1960 aún no había aumentado demasiado el nivel de CO2 atmosférico, gas que es esencial en el crecimiento de las plantas a través de la fotosíntesis. En nuestros días, cocinamos y nos calentamos sin necesitar leña; la cabaña ganadera ha disminuido sobremanera en los alrededores de la ciudad, por lo que los retoños de estas plantas pueden desarrollarse; y los niveles de C02 han pasado de 315 a más de 400 partes por millón desde 1960, favoreciéndose la fotosíntesis y el reverdecimiento del planeta, como por cierto acaba de publicarse en este artículo científico. Estas fotos de 1960 dejan bien a las claras la aridez de Toledo en 1960 en contraposición a lo que hoy observamos:
Azud de San Servando en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .
Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

Comparad por ejemplo con esta foto actual del gran Miguel Larriba, publicada en su blog Mira Toledo:
Toledo por Miguel Larriba (vegetación del Tajo)

En 1960 el avance de las obras de reconstrucción del Alcázar era ya notable. Sorprende ver el edificio a medio terminar:
Alcázar en plena reconstrucción entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

Las callejas de la ciudad fueron bien retratadas por la pareja. Mirad qué bella toma del cobertizo de Santa Clara:
Cobertizo de Santa Clara en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

Esta es una soberbia toma de la torre de la Catedral vista desde la Calle de Santa Isabel. Aparece a la derecha una casa en ruinas con un antiguo arco, detalle que confiere a la escena una belleza muy especial:
Vista de la Catedral desde la Calle de Santa Isabel en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

La zona de la Huerta del Granadal aún era terreno cultivado por hortelanos. Aparece al fondo el Hospital Tavera:
Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

Joseph y María del Carmen obtuvieron tomas panorámicas de la ciudad desde el Valle realmente bonitas:
Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .
Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .
Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

Son también de gran belleza estas vistas lejanas de la ciudad tomadas desde la carretera de Argés, aproximadamente:
Toledo desde la carretera de Argés entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .
Toledo desde la carretera de Argés entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

Aquí vemos una vista de la Mezquita del Cristo de la Luz. Está tomada cuatro años antes de que una de sus esquinas se viniera abajo por la humedad (en febrero de 1964). Como la perspectiva es la misma, pongo ambas:
Mezquita del Cristo de la Luz en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .
Derrumbe de parte de la mezquita del Cristo de la Luz de Toledo el 18 de febrero de 1964 debido a las humedades del subsuelo. Foto Flores. Archivo Luis Alba.

Esta es una vista de la Cuesta del Cristo de la Luz:
Cuesta del Cristo de la Luz en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

Aquí vemos la Calle Ancha en 1960:
Calle Ancha en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

En esta vista de la zona cercana al Baño de la Cava se observa el aspecto de la Fábrica de Armas, así como el elevado nivel de las aguas del Tajo. También se ve muy bien el terreno en el que hoy se levanta el Puente de la Cava:
Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

Aquí aparece San Juan de los Reyes:
San Juan de los Reyes en Toledo entre octubre y noviembre de 1960. Fotografías de Joseph Jacobson y Maria del Carmen Rivero Hernández .

Como veis, se trata de un completo repaso al Toledo de 1960 de la mano de una pareja de recién casados que formó una preciosa familia, a quien hoy debemos agradecer su generosidad a la hora de compartir con todos nosotros este álbum personal tan especial para ellos.

sábado, 16 de abril de 2016

Toledo fotografiado por el genial José Ortiz Echagüe

Uno de los más grandes fotógrafos que España en general y Castilla en particular ha dado a lo largo de la historia fue sin duda el genial José Ortiz Echagüe, polifacético y sensacional personaje mundialmente reconocido.
José Ortiz Echagüe nació en Guadalajara el 2 de agosto de 1886 y falleció en Madrid el 7 de septiembre de 1980. Fue ingeniero militar y piloto, además de un destacadísimo fotógrafo. Famoso por ser el fundador de dos de las empresas más grandes de España, Construcciones Aeronáuticas S.A. (CASA) en 1923 y Sociedad Española de Automóviles de Turismo (SEAT) en 1950, su faceta como fotógrafo no es menos importante. Denominado ya en 1935 por la revista American Photography como uno de los tres mejores fotógrafos del mundo, es para diversos autores el mejor fotógrafo español de la historia.
José Ortiz Echagüe fotgorafiando un castillo español

Encuadrado en la corriente del pictorialismo, su obra fotográfica muestra con gran sensibilidad humana costumbres y atuendos tradicionales así como diversos lugares de la geografía española, con gran peso para el mundo rural. En 1898 comenzó a fotografiar y logró su particular estilo gracias a que revelaba él mismo sus negativos usando la difícil y engorrosa técnica del carbón fresson, que usó en toda su obra artística y que confiere un especial matiz a sus positivos, con un acusado contraste que hace muy reconocibles sus fotografías. A ello sumaba su maestría en la composición de las escenas y un gran manejo de la luz. Publicó célebres libros como Tipos y Trajes (1930), España, Pueblos y Paisajes (1939), España Mística (1943) y España, Castillos y Alcázares (1956).
Viejo rabelero de la provincia de Toledo en 1920. Fotografía de José Ortíz Echagüe. Fondo Fotográfico de la Universidad de Navarra

Su obra se ha expuesto a lo largo del mundo, conservándose en el Legado Ortiz Echagüe de la Universidad de Navarra, con 1.000 composiciones originales y más de 20.000 negativos. El Museo del Traje de Madrid posee asimismo una buena colección de fotografías de la serie de Tipos y Trajes, adquirida en 1933. En Toledo obtuvo sensacionales fotografías a lo largo de su vida, desde los años 20 del siglo XX en adelante, incluyendo alguna fotografía aérea así como vistas de gran belleza, con su característico contraste que las hace inconfundibles. Son especialmente reseñables los cielos y las nubes que consiguió inmortalizar en nuestra ciudad.
Pasemos a ver las fotografías tomadas por Echagüe en nuestra ciudad, entre las que cabe destacar las obtenidas en el entorno del Puente de San Martín:
Baño de la Cava y Puente de San Martín. Fotografía de José Ortíz Echagüe. Fondo Fotográfico de la Universidad de Navarra
Puente de San Martín hacia 1928 por José Ortiz Echagüe
Puente de San Martín. Fotografía de José Ortíz Echagüe. Fondo Fotográfico de la Universidad de Navarra
Baño de la Cava en los años 20. Fotografía de José Ortíz Echagüe. Fondo Fotográfico de la Universidad de Navarra

Este es el otro puente medieval de la ciudad, el de Alcántara:
Puente de Alcántara. Fotografía de José Ortíz Echagüe. Fondo Fotográfico de la Universidad de Navarra

Ortiz Echagüe tomó una de las primeras fotografías aéreas de la ciudad en los años 20. Una auténtica joya es esta vista general que recomiendo ampliar:
Foto Aérea de Toledo por José Ortiz Echagüe hacia 1928

Las vistas desde el Valle obtenidas por el alcarreño son también dignas de mención:
Vista de Toledo en los años 20 por José Ortiz Echagüe
Toledo a comienzos del siglo XX (años 20 probablemente) fotografiado por José Ortíz Echagüe
Toledo a comienzos del siglo XX (años 20 probablemente) fotografiado por José Ortíz Echagüe
Vista del Alcázar de Toledo en los años 20 por José Ortiz Echagüe

Algunos de los monumentos más famosos de la ciudad, como la Puerta del Sol, la Puerta de Bisagra o el Castillo de San Servando fueron inmortalizados por Echagüe:
Toledo a comienzos del siglo XX (años 20 probablemente) fotografiado por José Ortíz Echagüe
Toledo a comienzos del siglo XX (años 20 probablemente) fotografiado por José Ortíz Echagüe
Castillo de San Servando en los años 50. Fotografía de José Ortíz Echagüe.

Como colofón, una rara y excepcional fotografía a color que nos muestra la procesión del Corpus a mediados del siglo XX:
Procesión del Corpus por Ortiz Echagüe. enciclopedia.

Como podéis comprobar, estamos sin duda ante un verdadero portento de la fotografía, que dejó además una serie impagable de estampas del resto de la provincia de Toledo que exceden a la temática de este blog. Recomiendo que rastreéis sus fotos de castillos (Barcience, Maqueda, San Martín de Montalbán, Polán y un largo etcétera) así como su serie etnográfica muy centrada en la localidad de Lagartera.

sábado, 2 de abril de 2016

José Isbert y Cantinflas en Toledo a finales de los años 50

Si hay dos actores de habla española de mediados del siglo XX que aunaron a partes iguales el cariño del público tanto por su capacidad de hacer reír como por la ternura que desprendían sus personajes, estos son probablemente José Isbert y Cantinflas.
Con motivo del 50º aniversario del fallecimiento de Isbert (que se cumplirá en noviembre) y del 60º aniversario del estreno de La Vuelta al Mundo en 80 días, la película más toledana de Cantinflas que le hizo ganar un Globo de Oro, hoy me apetece traeros curiosas y bellísimas fotografías de ambos en Toledo que recientemente he adquirido.
Comenzaremos por el entrañable José "Pepe" Isbert, indudablemente uno de los mejores actores españoles de todos los tiempos, quien alrededor de 1957 grabó en nuestra ciudad la película Un americano en Toledo, estrenada en 1960. En el filme compartía cartel con Silvia Morgan y Georges Riviere, actuando Isbert en el papel de mayordomo.
Cartel de Un americano en Toledo
Silvia Morgan y Jorge (Georges) Riviere en el Puente de San Martín durante el rodaje de Un Americano en Toledo en 1957. Revista Primer Plano.

Hace unas semanas compré una sensacional fotografía tomada durante el rodaje en una portada toledana. Se trata de una estampa de belleza impagable, no solo por las personas que en ella aparecen, sino por la calidad de la toma y por las curiosidades que nos deja su observación detenida. La localización concreta de la imagen se sitúa en la calle Santa Isabel, en la portada del palacio que hoy acoge el Hotel Santa Isabel. En la imagen aparece todo un catálogo de electrodomésticos que en la España de 1957 eran verdaderas novedades y productos de lujo, eso sí, de fabricación española. Me hace gracia la denominación utilizada entonces para las hoy conocidas como lavadoras: en el embalaje de la marca Otsein pueden verse con claridad las palabras "lavarropas eléctrico". A la izquierda de la vista podemos apreciar una olla exprés, y sobre la nevera se apoya en una curiosa pose el gran Pepe Isbert. La bella Silvia Morgan se apoya también en la nevera y luce un vestido típicamente de la época, muy pin-up, con un cinturón extremadamente ceñido a la cintura:
José Isbert y Silvia Morgan en Toledo durante el rodaje de Un Americano en Toledo (1960)
José Isbert en Toledo durante el rodaje de Un Americano en Toledo (1960)
Silvia Morgan en Toledo durante el rodaje de Un Americano en Toledo (1960)

Otras fotografías curiosas tomadas en Toledo durante el rodaje son estas dos, en las que vemos tanto a Isbert como a Morgan y Riviere en el interior de alguna casa típicamente toledana, con su mobiliario netamente castellano:
Pepe Isbert y Silvia Morgan en Toledo durante el rodaje de Un americano en Toledo en 1957
Pepe Isbert en Toledo
José Isbert y Georges Riviere durante el rodaje de Un Americano en Toledo en 1957

La expresividad de Isbert era sencillamente espectacular y quedó para siempre grabada en la retina de millones de españoles, en títulos como Bienvenido Mr. Marshall o La Gran Familia. Pocos años después del rodaje en Toledo, en 1963 se sometió a una operación a causa de la afección faríngea que confirió durante años su inconfundible tono de voz, quedando su corazón dañado y falleciendo finalmente tres años después, en 1966, de un infarto de miocardio:
José Isbert y Georges Riviere en Toledo durante el rodaje de Un Americano en Toledo en 1957

El otro protagonista de esta entrada es el genio mexicano Mario Moreno "Cantinflas", que rodó en Toledo ese icono del cine de mediados del siglo XX como es La Vuelta al Mundo en 80 días, adapatación de la obra de Julio Verne estrenada en 1956 y en la que compartió protagonismo con David Niven. De ese rodaje data la que es probablemente una de las fotografías más bellas jamás tomadas en Toledo: el vuelo del famoso globo "La Coquette" sobre la ciudad (el rodaje se produjo entre agosto y octubre de 1955).
El globo "La Coquette" sobrevuela Toledo durante el rodaje de La Vuelta al Mundo en 80 días entre agosto y octubre de 1955

Dado el pánico que David Niven tenía a las alturas es poco probable que fuese él quien estuviera subido en el célebre globo:
Globo La Coquette durante el rodaje de La Vuelta al Mundo en 80 días (agosto-octubre de 1955 en Toledo)
Cantinflas y David Niven en La Vuelta al Mundo en 80 días
Cantinflas y David Niven en La Vuelta al Mundo en 80 días

Pero la mejor fotografía tomada a Cantinflas en Toledo no data de aquel rodaje, sino de una visita que hizo a la ciudad en 1959. El gran fotógrafo Gerard Decaux tomó una soberbia instantánea que he tenido la suerte de obtener en alta resolución y que desde que la vi pasó a mi lista de imágenes predilectas de la ciudad. Se trata de una toma en la que el genial actor mexicano desciende bajo el Arco de Palacio ante la atónita mirada de un grupo de jóvenes seminaristas que parecen no creer lo que sus ojos están viendo:
Cantinflas en Toledo en 1959. Fotografía de Gerard Decaux

Las expresiones de los chicos son tan elocuentes que bien merecen una ampliación:
Seminaristas atónitos ante la visita de Cantinflas a Toledo en 1959. Detalle de una foto de Gerard Decaux
Visita de Cantinflas a Toledo en 1959. Detalle de una foto de Gerard Decaux

En definitiva, estamos ante nuevas muestras del privilegio de ciudad con el que contamos. Un lugar mágico por el que han pasado tantos y tantos personajes célebres debido al atractivo de la ciudad, en este caso como incomparable escenario de cine. Ojalá entre todos seamos capaces de valorar y cuidar este tesoro llamado Toledo.
© TOLEDO OLVIDADO
Maira Gall